
¿Sabías que el color y el tipo de humo pueden ser indicativos de problemas mecánicos? Ya te lo vamos a explicar para que puedas estar más atento:
- Humo blanco: Si ves que tu vehículo echa humo blanco, ¡atención! Esto puede indicar que está quemando aceite, o incluso que el líquido de refrigeración está entrando en los cilindros, lo que podría ser señal de una junta de culata dañada.
- Humo azul: El humo azul es un claro indicador de que tu motor está quemando aceite. Esto puede deberse a un desgaste en los anillos de pistón o en las válvulas.
- Humo negro: Si tu vehículo expulsa humo negro, es posible que esté quemando demasiado combustible. Esto puede ser causado por un filtro de aire sucio, inyectores defectuosos o problemas en el sistema de inyección.
¿Qué hacer si ves humo de estos colores?
Aquí hay algunas recomendaciones:
- Lleva tu vehículo a un mecánico: No esperes a que el problema se agrave. Un diagnóstico profesional puede salvarte de reparaciones mayores.
- Revisa los niveles de aceite y refrigerante: Mantener estos niveles adecuados es clave para un funcionamiento óptimo.
- Haz un mantenimiento regular: Recuerda que un vehículo bien cuidado tiende a tener menos problemas y a consumir menos combustible.
Para evitar estos problemas, realiza la Revisión Técnico Mecánica, la cual no solo asegura que tu vehículo esté en condiciones óptimas para circular, sino que también verifica la emisión de gases. Asegúrate de hacerla anualmente para evitar sanciones y contribuir a un ambiente más limpio.
En Previcar estamos aquí para ayudarte. Así que, la próxima vez que salgas a rodar, presta atención al humo de tu vehículo. Puede que te esté diciendo más de lo que imaginas. Agenda ya tu revisión aquí: